Tomar la calle para tomar la palabra

marco-dominguez-aumeA modo de excusa. Gente cercana a mí, con la mejor de las intenciones, me pregunta por qué inicié este blog y si no tengo miedo a “caer mal” a ciertas personas. A la primera cuestión diré que escribo porque la libertad que desprenden unas líneas, aunque estén mediocremente redactadas, puede ser contagiosa. Las letras siempre sobreviven al que las junta y son fiel testigo de lo que fue, es y será. Ojalá en el futuro el diálogo se mida en párrafos y no en días de prisión.

Al respecto de “caer mal”. Un gran filósofo dijo que no es síntoma de buena salud el estar perfectamente adaptados a una sociedad enferma. Tener el desprecio de los sinvergüenzas es siempre una honra para las personas decentes. Si mañana obtuviera el reconocimiento de individuos con una dudosa reputación me iría a casa preocupado para reflexionar sobre lo que he hecho mal. La primera victoria es vivir acorde a una ética que te permita mirarte todos los días en el espejo. ¿Miedo? Solo al silencio.

Dicho esto, hablemos del COPERFAS. Las últimas reuniones han puesto a las asociaciones en una vía muerta siendo la tramitación de la Ley de la Carrera Militar, que deja fuera de ella a la Tropa, la puntilla para decidirnos a convocar movilizaciones. Ante un diálogo de sordos hay que concienciarse de que tendremos que salir a la calle, la cuestión es decidir cuando: si ahora exigiendo derechos o a los 45 años lamentando fracasos. Decidieron no escucharnos en las instituciones, ahora tendrán que hacerlo desde las plazas.

Nos repetirán machaconamente que no podemos manifestarnos haciendo uso de nuestra condición militar. Que no se preocupen, lo haremos como ciudadanos y junto con los movimientos sociales lo haremos como un país que recupera en las calles la dignidad que le han robado en los despachos. En el pasado nos dijeron que las asociaciones eran ilegales, y nos asociamos. Nos intentaron mentir diciendo que no podíamos manifestarnos, y nos manifestamos. Ahora dicen que tengamos cuidado con como lo hacemos. Pues miren ustedes, con todo el orgullo que nos da ser trabajadores honrados defendiendo nuestro puesto de trabajo.

Se está dialogando con todas las asociaciones para hacer un bloque conjunto. Nuestros compañeros no esperan otra cosa de nosotros que no sea ganar la democracia para las Fuerzas Armadas. No esperan otra cosa que no sea una carrera digna, terminar con los contratos temporales y seguridad para los que han dado los mejores años de su vida defendiendo a esta nación. A los ciudadanos de uniforme no han hecho más que robarnos los sueños, ya es hora de despertar.

Como digo, se está invitando a participar a todas las asociaciones profesionales. Cada una deberá decidir si quiere caminar al lado de AUME para ser vanguardia de cambio, o va a ser rehén de sus ausencias. Porque al final los derechos no se ganan en internet, sino con el trabajo que a lo largo de los años marcan un rumbo que va conquistando centímetro a centímetro libertades a nuestra costa, no a la de otros.

Fuente : marcodominguez