Cristina Muñoz: “Estoy en la calle por haber denunciado a un oficial”

cristina-muñoz-600Entrevista que nos remite ATME con la soldado Cristina Muñoz que fue expulsada del ejercito supuestamente por denunciar a un mando . La ex soldado Cristina Muñoz concedió una entrevista a la revista  Interviú y de la cual dice que » no se ajusta mucho a la entrevista que yo di » .

“Si hubiera sido un hombre seguiría en el Ejército”

Cristina Muñoz ingresó en el Ejército en 2005 y estuvo destinada en el Regimiento de Infantería Ligera Soria nº9. En 2007 durante unas maniobras en Fuerteventura sufrió un desmayo y denunció a su alférez por no auxiliarla. El 31 de marzo de 2010 el Juez Togado Militar Territorial nº52 lo desestimó y tras un recurso presentado un año después, el Tribunal Constitucional corroboró la decisión judicial militar. El resultado es que Cristina está fuera del Ejército por no ser considerada ‘idónea’ como militar.

¿Por qué no estás de acuerdo con la entrevista que ha salido publicada en Interviú?

Porque cualquier persona que lea la entrevista se lleva una idea equivocada y sesgada de lo que realmente me sucedió, no se ajusta mucho a la entrevista que yo di.
Ser militar es vocacional, al menos para mí. Yo no lo concibo únicamente como una profesión, es mucho más. Aunque respeto a los que ingresan en el ejército buscando una salida profesional, para mí ha sido, es y será siempre mi vocación. Todo esto con independencia del resultado del procedimiento iniciado en 2007. En él lo que he buscado ha sido que se me haga justicia, se respete la legislación militar y se me devuelva la condición de militar, todo ello teniendo en cuenta que la máxima expresión de la Disciplina Militar es el acatamiento a la Constitución.

¿Por qué te rescindieron el compromiso?

Sólo hay una explicación. Por haber denunciado a un oficial, no existen más motivos que ese. Yo siempre he cumplido con mis obligaciones militares y me he esforzado al máximo en el desempeño de mis deberes tal y como consta en mi expediente. Lo que se puede demostrar objetivamente es que nunca tuve ningún problema y además, estaba bien considerada por mis mandos y compañeros. Todo era perfectamente normal hasta que surgió una incidencia relacionada con un parte que presenté por lo que médicamente se puede considerar mala atención sanitaria, conforme la ‘Lex artis’, afectando a mi salud entre otros temas un poco más graves.
Se puede comprobar que hasta que presenté el parte contra dicho mando mi expediente estaba completamente limpio, y desde ese momento se sucedieron de forma reiterada y en muy poco tiempo arrestos por faltas leves, tres de forma consecutiva y en apenas 3 meses y por la acumulación de estos arrestos me lo convirtieron en un procedimiento de falta GRAVE.
Y aún sabiendo que ese trato era injusto, decidí que para calmar un poco los ánimos, lo mejor era cumplir con esos arrestos e incorporarme después a mis funciones. Creía que haciendo esto la situación se calmaría y que al final, las Fuerzas Armadas verían en mi actitud mi vocación de servicio, lealtad, subordinación, obediencia, amor a mi patria. Todas estas cosas son las que me inspiran cada día a seguir hacia delante.

¿Es cierto que no sabías que podías presentar alegaciones?

Sí, no lo supe hasta que llegué a mi último destino, en el grupo logístico de El Goloso. Allí mis mandos y mis compañeros son los que me informaron de que tenía derecho a presentarlas. Nadie me informó en su momento de que podía hacerlo.

¿Qué se alegó desde el ejército cuando te comunicaron la baja de él?, ¿cuáles fueron sus razones?

Simplemente se me comunicó que no era ‘apta’ para ser militar.

Durante el tiempo que pasaste en el ejército ¿has sufrido o has visto sufrir vejaciones por parte de superiores por el mero hecho de ser mujer?

Esta pregunta me llama la atención y puedo imaginar hace en referencia al titular tan inapropiado de la publicación de Interviú. “Me echaron del ejército por tener tetas y ser rubia”. Lo que está claro es que creo que si hubiera sido un hombre seguiría en el ejército.
En la Fuerzas Armadas no somos super hombres, somos ciudadanos que, con independencia de ser hombre o mujer, desempeñamos las funciones que corresponden a nuestro cargo. Yo soy Soldado, los que tienen que adoptar medidas ante estas situaciones, si tienen conocimiento de hechos irregulares, son los mandos. Eso está contemplado en la ley del régimen disciplinario de las Fuerzas Armadas. Yo lo único que puedo decir es que a pesar de vivir situaciones muy desagradables y discriminatorias por presentar un parte a un oficial, cumplí fielmente con las Reales Ordenanzas y con la Constitución Española.

¿Por qué quieres que te readmitan? Si lo hicieran pero sin reconocer su error, ¿lo aceptarías igualmente?

Quiero que me readmitan porque no hay causa legal que, conforme la legislación vigente, justifique la perdida de mi condición de Militar Profesional.
Tal y como he dicho anteriormente, las Fuerzas Armadas son mi vida y vocación. Espero volver a vestir muy pronto el uniforme, con orgullo y satisfacción con la misma ilusión que tuve cuando ingresé.

¿Cuentas con el apoyo de algunos compañeros del ejército? ¿qué te dicen?

Nunca tuve ningún tipo de problema antes del incidente sanitario por el que interpuse parte al Alférez. Me sentí siempre muy valorada tanto por mis mandos como por mis compañeros.
Considero que el compañerismo no desaparece de la noche a la mañana. Lo que pasa es que si percibo el miedo que desprenden, supongo que temen correr la misma suerte que yo. Aún así, me siento muy arropada, sobre todo por mi grupo GLXII (Grupo Logístico XII).