La Armada prohíbe pruebas con señuelos de misiles tras el accidente

señuelos-misilesEl Ministerio de Defensa, a través de la Armada, ha decidido, como medida de seguridad, prohibir la realización de pruebas con señuelos de misiles como el que provocó un accidente en Ferrol a bordo de la Almirante Juan de Borbón (F-102) en todas las unidades de la Flota que disponen de ese sistema.

Esta situación afecta, en concreto, a más de una veintena de buques de guerra, tanto si se encuentran en sus respectivas bases como si están navegando de maniobras o en misiones reales. El objetivo es evitar que se produzcan nuevos siniestros, por lo que la prohibición continuará siendo efectiva hasta que la Marina no concluya la investigación abierta sobre los hechos.

El miércoles, en el marco de un ejercicio rutinario de carga de tubos lanzadores de este tipo de señuelos -cuya finalidad es intentar desviar misiles de fuego enemigo- tuvo lugar un «lanzamiento fortuito» de uno de esos dispositivos. Aunque, en principio, debería estar inerte, sin carga explosiva, su deflagración provocó heridas leves a seis integrantes de la dotación. En cinco de los casos en los oídos y en otro, a mayores, también en los ojos.

Defensa estableció que «mientras no se aclaren las causas del incidente, se ha prohibido realizar nuevas pruebas de este tipo». Ahora ha trascendido que, como ya se ha mencionado, esta medida de seguridad afecta a la práctica totalidad de los buques de gran porte de la Armada española. En concreto, la prohibición se ha aplicado a las cinco fragatas de la serie F-100; a las seis de la serie F-80; a los buques anfibios y de proyección logística Galicia y Castilla; al megabuque Juan Carlos I; a los barcos de aprovisionamiento en combate Patiño y Cantabria, a cuatro Buques de Acción Marítima (BAM) y a dos corbetas.

De esa veintena de unidades tienen base en Ferrol las cinco fragatas F-100 y los buques de aprovisionamiento en combate Patiño y Cantabria.

Tal y como ha podido saber La Voz, no obstante, esta medida de seguridad no afecta a la operatividad de los barcos, ya que se trata de una prohibición de uso de munición de ejercicios, no de la real.

Con respecto a los seis heridos leves de la dotación de la fragata F-102, fuentes militares confirmaron ayer que todos ellos recibieron el alta médica, tras las pertinentes revisiones hospitalarias, a media tarde del mismo día del accidente. Los afectados fueron cuatro varones -D. LL. G de 26 años; A. M. M, de 27; C. V. P, de 37; y G. S. F., de 34 años- y dos mujeres: A. D. P., de 26 años, y A. B. P., de 33.

Por otro lado, al mismo tiempo que la Armada continúa investigando los hechos ocurridos a bordo de la Almirante Juan de Borbón, esta seguía con su programación de trabajo, sin que el incidente que registró a bordo la haya variado. De hecho, ayer por la mañana salió a aguas del litoral local a realizar ejercicios rutinarios junto con la F-103 y el buque de aprovisionamiento en combate (BAC) Patiño.

Las fragatas F-100 están especialmente diseñadas para el uso de misiles y defensa antiaérea, portando el avanzado sistema de combate Aegis. De hecho, en su preparación se incluyen navegaciones a polígonos de tiro de Estados Unidos para probar su sistema de lanzamiento.

Fuente : Lavozdegalicia